Reseña: Drácula

21 noviembre 2017

Título: Drácula
Autor: Bram Stoker
Saga: No
Editorial: Gaviota (mi edición, pero hay en muchisimas editoriales)
Género: Gótico, terror
Año de publicación: 1897
Nº de páginas: 327
Edición: Tapa dura
ISBN: 8439209347
Precio: Desde 5,95€
"Jonathan Harker, un joven agente inmobiliario, viaja a Transilvania para concluir unos trabajos en el castillo del conde Drácula. Harker se convierte en el prisionero del conde y va descubriendo, poco a poco, la naturaleza de su captor y su terrible propósito de viajar a Londres para extender su poder y crear otros seres de su misma especie. Jonathan consigue huir del castillo y, una vez en Inglaterra, con ayuda de su esposa Mina, los doctores Seward y Van Helsing, y los valerosos Quincey P. Morris y Arthur Holmwood inicia una persecución para acabar con la existencia del sangriento vampiro."




 Este es uno de esos libros de los que todos creemos conocer su contenido debido a las múltiples adaptaciones que de él se han realizado. Nada más lejos de la realidad. Cuando te sumerjes en él, compruebas como todo lo que pensabas conocer de esta historia, todo lo que pensabas conocer sobre el mundo de los vampiros, es producto de otras novelas, pero no de esta.

El año pasado, alrededor del mes de Octubre, tuve la fiebre de los clásicos de la literatura gótica para celebrar Halloween, así que decidí empezar por este libro, pensando que sería algo muy diferente, casi aburrido. ¡Cuánto me equivocaba!

Tal y como describe la sinopsis, nos ponemos en un principio en la piel de Jonathan Harker, que se dispone a realizar unas diligecias que en principio se prevén rápidas, en el castillo del Conde Drácula. Ya solo el viaje de ida comienza de manera sospechosa por los comentarios que recibe en el trayecto, haciendo que merme la seguridad que en principio pueda tener. Finalmente, y tras su llegada al castillo, los hechos se suceden de manera muy diferente, quedando secestrado por el conde y viendo su huida cada vez menos probable.
No desvelaré mucho más de esta primera parte del libro, ya que él mismo se encarga de contar el transcurso de los días a través de las cartas que envia, sin suerte, a su amada Mina. Es en esta parte donde podemos descubrir cuánto han cambiado las historias de vampiros desde esta novela, ya que observamos su comportamiento, sus costumbres, sus debilidades y sus fortalezas, dejando de lado vampiros que relucen al sol, cuyos ojos cambian de color en función de su "dieta".

Simultáneamente, la acción nos traslada a Inglaterra, donde Mina y su amiga Lucy esperan el regreso de Jonathan. Podemos ver entonces fragmentos del diario de Mina, mostrando su preocupación por la falta de noticias del señor Harker.

En la siguiente parte, todo ocurre de una manera mucho más ágil y rápida, ya que entran en escena varios personajes más, descubriéndonos todos los matices de la historia.
Lucy, amiga de Mina, cae enferma, aquejada de una misteriosa enfermedad que termina con su vida y que dará pie a una serie de descubrimientos y reuniones para terminar con la causa de la enfermedad, para vengar su muerte. Es aquí donde entran en escena los pretendientes de la muchcha, además de Van Hellsing, conocido hoy en día por ser cazador de vampiros, pero cuyo peso en la novela va mucho más allá. Este, junto con los demás compañeros, se ven envueltos en la caza del vampiro más famoso y peligroso de todos los tiempos.

Se trata de una novela epistolar, es decir, podemos ver el transcurso de la historia a través de las cartas que los diferentes personajes protagonistas se envían entre sí, y de ls diarios personales de cada uno. Esto proporciona una gran agilidad a la novela, ya que estas cartas y diarios no son extremadamente largos, y podemos ir conociendo desde el punto de vista subjetivo de cada uno, como va evolucionando la trama y pasando los días. Gracias a esto, no nos perdemos detalle alguno sobre los acontecimientos, aunque estemos alejados de la figura del narrador omisciente.

La ambientación está extremadamente cuidada. No esperéis un terror explícito, ni escenas especialmente sangientas ni violentas. No esperéis saltos inesperados. Aquí la tensión se cuece a fuego lento. El ambiente es oscuro y opresivo, sientes que siempre hay una presencia siniestra y que esta te acompaña donde quiera que estés leyendo. Es una sensación de inquietud constante, una calma tensa, la que se siente mientras se lee este libro.
Queda muy lejos la imagen del vampiro seductor, del vampiro que resulta más un galán que un monstruo, mostrando el verdadero ser despiadado, egoísta y cruel que es.

Vemos, además, una historia típicamente moralizadora, ya que utiliza muchas referencias religiosas como protección contra el mal y la oscuridad, haciendo referencia al comportamiento y la actitud que se debe tener en la vida si no se desea un brusco final. El papel de la mujer, en este caso, de Mina, se entiende como abnegado, frágil, delicado, pero fácilmente corrompible. Vemos que es una mujer inteligente, con gran disposición, carácter y valentía, pero ello no hace que se la trate como una damisela en apuros a la que hay que proteger y que no puede verse inmersa en los deberes de sus protectores.
Debemos recordar el momento en el que está escrita la novela para entenderlo y no ver en ello una objeción a la obra, sino un contexto histórico marcado por la época.

En definitiva, es una obra arrebatadora, un clásico que no hay que perderse si realmenete se pretende conocer al vampiro clásico y disfrutar del miedo en su esencia más pura. Un clásico fácil de leer, con el que adentrarse en la literatura gótica.





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